domingo, 26 de junio de 2016

Máscaras C.63



MÁSCARAS.


Cuando Lali y Peter se encontraron por la tarde ninguno mencionó la cita que tendrían esa noche.

Antes de que Lali bajara del coche, Peter tomó su mano, primer gesto amable que tenía en todo el día, sabía que si estaba bien con Lali, ella tarde o temprano le diría todo lo que quería saber, más allá de eso, habían estado demasiado tiempo separados como para perder el tiempo peleándose.

Peter: ¿Te parece si mañana te vengo a buscar temprano y desayunamos juntos?
Lali: Si, pero llámame cuando vayas a venir para estar lista y que no tengas que esperar.
Peter: Pero a mí no me importa esperarte – se acercó a ella- si hace falta te espero 8 o 15 años, incluso toda la vida.
Lali: ¿Ya se te pasó el enfado?
Peter: Estaba en mis días – Lali se rio- no me hagas caso cuando me ponga así de idiota.
Lali: ¿Y por qué insististe en que viniera hoy contigo? Pensé que querrías estar solo.
Peter: Mejor mal acompañado que solo.
Lali: Ah, gracias – se cruzó de brazos haciéndose la ofendida.
Peter: Era broma.

Le tomó la cara entre sus manos y la besó.

Peter: Sabes que me gusta estar contigo.
Lali: A mí también – lo volvió a besar – pero ahora me tengo que ir.
Peter: Yo también, que descanses.
Lali: Tú igual. – abrió la puerta para irse.
Peter: Oye, ¿No se te olvida algo?
Lali: ¿Qué cosa?
Peter: Mi beso de las buenas noches – Lali Sonrió y lo volvió a besar.
Lali: No me enojo si más tarde me llamas.

Peter le sonrió y se bajó de auto.

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A eso de las 21:30hrs. Peter llegó a la cita de Paula, ella lo estaba esperando con un aperitivo, él se quedó frente a ella dudando si sentarse junto a ella.

Paula: Pensé que ya no venias.
Peter: Estuvo a punto de no hacerlo.
Paula: Entonces que bueno que viniste, ¿Y Lali?
Peter: La verdad es que no la dije nada y me gustaría que no supiera.
Paula: ¿Por qué? No estamos haciendo nada malo.
Peter: Si, pero vosotras nunca os llevasteis bien.
Paula: Como digas, ¿no te piensas sentar?
Peter: Ah, sí.

Se sentó y el camarero se acercó.

Camarero: ¿Qué desean tomar?
Peter: Lo mismo que la señorita.
Camarero: ¿Algo más?
Peter: De momento no.

El camarero se fue dejando a Peter y Paula solos nuevamente, en ese momento lo único que Peter quería es que el tiempo pasara rápido.

Más tiempo pasaba, más se arrepentía de haber ido, más nervioso se ponía y no por estar con Paula, si no por no habérselo dicho a Lali y que más tarde se enterara de esa salida por otra persona.

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Lali y Nico llegaron minutos más tarde al mismo restaurante.

Paula los vio entrar y sonrió, Nico al verla corrió la mirada y miró a Lali. Peter miró a Paula que seguía sonriendo.

Peter: ¿Qué te pasa que no dejas de sonreír?
Paula: Me gusta estar en tu compañía, ¿Te parece si brindamos por nuestra amistad?

Peter solo levantó su copa y sonrió, miró la hora intentado inventarse alguna excusa para irse.

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Lali y Nico llegaron en compañía del camarero a su mesa reservada, Lali se sentó y al levantar la cabeza para mirar a Nico, vio a Paula en compañía de Peter, tragó en seco y sus ojos amenazaban con ponerse a llorar, Nico inmediatamente supo a que se debía esa reacción.

Nico: ¿Qué pasó Lali?
Lali: ¿Esa no es Paula?

Nico volteó y lo vio, Paula se había acercado un poco más a Peter y aunque sabía que los estaban mirando, en ningún momento los miró.

Nico: Así parece.
Lali: ¿Y está con Peter?
Nico: No, creo que no – en último momento cambio de planes, pero ya era demasiado tarde – Tal vez deberíamos irnos.
Lali: No, mejor vamos a saludarlos ¿No crees?
Nico: Ehh, Lali, no creo que…

Lali caminó seguida por Nico hasta la mesa de Peter y Paula.

Paula al ver que se acercaban besó a Peter.

Lali: Buenas noches, que sorpresa encontraos aquí.

Peter quien ni siquiera había tenido tiempo de reaccionar al beso de Paula que había durado menos de 5 segundos, se separó bruscamente de Paula y miró a Lali.



CONTINUARA…

viernes, 24 de junio de 2016

Máscaras C.62

MÁSCARAS.


Peter no sabía que tan buena idea era eso de volver a ser amigo de Paula ahora que estaba intentando que las cosas con Lali salieran bien, Paula y ella nunca se había se llevado bien y estaba casi seguro que esa relación cambiara.

Consciente de que esa amistad le traería más de un problema con Lali, estrechó la mano de Paula y ella sonrió, más allá de ser su amiga, le parecía mal dejarla con la mano levantada y apreciaba la manera civilizada con la que había tomado las cosas.

Paula: No sé si es cosa mía, o te veo desconfiado.
Peter: Desconfiado no, pero si se me hace extraño esto.
Paula: Te entiendo y para que veas que no pretendo nada malo, te invito a cenar.
Peter: ¿A cenar?
Paula: Si, pero tranquilo, sería en un lugar público y por supuesto con Lali.
Peter: No creo que sea buena idea, vosotras nunca os habéis llevado bien.
Paula: Pero piensa, que podríamos cambiar las cosas.

Peter la miró dudando.

Paula: Los espero aquí.

Le dio un papel con la dirección y la hora del lugar.

Paula: Si Lali no viene, al menos ven tú.

Se levantó de la silla y antes de que se diera cuenta ella ya se había ido, al llegar al garaje hizo un llamada telefónica, para asegurarse de la reserva, estaba casi 100% segura que iría solo y si era así todo saldría perfecto.

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Lali estaba hablando con Ro y con Mery cuando Nico la llamó a su oficina, reviró los ojos y se dio la vuelta para ir con él, al entrar se sentó frente a Nico y él la miró.

Nico: Tengo excelentes noticias para ti.
Lali: Te escucho.
Nico: Esta noche tenemos una cena con 3 grandes empresarios, los cuales vieron tus fotos y quieren hablar contigo y ver la posibilidad de trabajar junto a ellos.
Lali: Yo no le mostré mis fotos a nadie.
Nico: Tú no, pero yo me tomé el atrevimiento de enseñarlas, espero que no te moleste.
Lali: No me molesta, ¿Pero entonces que va a pasar con este trabajo?
Nico: Si tú quieres puedes trabajar en los 2 sitios, si es que el horario es flexible.
Lali: Gracias, pero no me quiero hacer ilusiones tan pronto, ¿Cuándo me has dicho que es la cena?
Nico: Esta noche, ¿puedes?
Lali: Tratándose de trabajo siempre puedo.
Nico: Cierto, se me había olvidado, ¿quieres que pase a buscarte? No quiero ser… cargante, pero más allá de lo que sienta por ti quiero ser tu amigo.
Lali: Claro que si, además creo que te debo una disculpa por mi comportamiento la última vez que te vi.
Nico: Disculpa aceptada, ahora te tengo que dejar, tengo que confirmar la cena y terminar los últimos detalles de la cena.
Lali: Gracias por todo.
Nico: De nada, ¿te parece que te recoja a las 9?

Lali asintió y se fue, Nico cogió el teléfono y llamó a Paula.

Nico: Ya hice lo que me dijiste.
Paula: ¿Y salió bien?
Nico: Perfecto.

Nico respiró hondo, no estaba acostumbrado a jugar sucio y tampoco estaba seguro de querer ver a Lali sufrir por Peter, pero ante las insistencias de Paula, tras haberlo puesto al tanto de la vida de ambos, la idea se había vuelto tentadora y más pensando que luego consolaría a Lali, más todo lo bueno que él sacaba de todo eso.

Nico: Pero la verdad yo creo que mejor deberías dejar a Peter, pareces una arrastrada.
Paula: Cállate, tú no sabes nada.
Nico: Si Peter no fue capaz de enamorarse de ti los años que estuvieron juntos, no creo que ahora lo haga.
Paula: Cuando quiera tu opinión te la pido.
Nico: Tampoco me hables así, porque de esta mierda no creo que salga nadie beneficiado y no me cuesta nada abrir la boca y…
Paula: Está bien, ¿A qué hora dijiste que os juntaríais?
Nico: A las 9 paso a por ella.
Paula: Perfecto, te vas a ganar el cielo con esto.
Nico: Lo dudo.

Ambos colgaron y Paula se quedó sonriendo.

Paula: Presiento que vas a estar otra temporada larga lejos de tu hijo.

Sonrió y abrió el armario para elegir que ropa llevaría.

Paula: Y de ese mocoso me encargo después, tampoco se me va a escapar.



CONTINUARA…



2 capítulos por el tiempo sin subir capitulo, aun así intentaré hacer otro más y si no lo subo hoy lo subo mañana. ;)

Máscaras C.61

MÁSCARAS.

Cande: No sé de dónde has sacado eso.
Agus: Cande, igual es necesa…
Cande: No es necesario. – lo miró.-
Peter: Entonces es verdad.
Cande: Yo no sé nada.
Peter: No te creo, Lali y tú os contáis de todo.
Cande: No todo, nunca hemos tocado ese tema.
Peter: Javi tiene el derecho de saber quién es su padre y yo de saber si él es mi hijo.
Cande: ¿Y si fuera así, irías a decirle?
Peter: Claro que no… o todavía no, pero quiero recuperar mi tiempo perdido con él.
Cande: No des las cosas por hecho, ni especules.
Peter: Si no me dicen nada, no tengo elección.
Cande: Lo siento mucho por ti, pero no me toca hablar a mí sobre ese tema y menos contigo.
Peter: Yo sé que tú sabes.
Cande: Aunque supiera… lo mejor es que le preguntes a Lali sobre ese tema.
Peter: A ella no se lo voy a preguntar, porque nunca se lo que va a decir.

Caminó hasta la puerta y los miró.
Peter: Pensé que podía contar con vosotros.
Agus: Sabes que puedes.
Peter: No se nota, aun así estaos tranquilos que no os voy a volver a preguntar sobre ello, ya sé que no me vais a contestar.

Abrió la puerta y se fue, Agus y Cande se miraron.

Agus: Tu amiga va a acabar matando a Peter de un disgusto.
Cande: También es tu amiga y Peter mi amigo, pero a mí no me toca hablar sobre eso, Lali es la única que tiene derecho a hablar sobre ese tema.
Agus: Tienes razón, espero que puedan arreglarse.
Cande: Yo también.

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El Lunes Lali estuvo todo el día trabajando fuera con Vico, solo se había cruzado con Peter por la mañana y solo 5 minutos.

En la hora libre que tenían los 2 se juntaron, al terminar fueron a la plaza y se sentaron en la sombra de un árbol, Peter tenía su cabeza en las piernas de Lali, mientras ella le acariciaba el pelo.

Lali: ¿Qué pasa?
Peter: Nada.
Lali: Seguro, mira que esta mañana te vi raro.
Peter: Son ideas tuyas.

Su tono no fue el más adecuado y aunque Lali se dio cuenta decidió no darle importancia y siguió enredando con su pelo.

Lali: No creo, tú no eres así.
Peter: ¿Así cómo?
Lali: Callado… y no te enfades pero hoy te he notado un poco insoportable, se que algo te pasa.
Peter: Entonces te vas a tener que quedar con la duda.

Se levantó de golpe y Lali lo miró.

Peter: Así como yo me tengo que quedar con la duda de muchas cosas – miró su reloj- tenemos que volver.

Lali se levantó y uno se fue a su oficina en completo silencio, tal y como habían estado todo el rato que pasaron juntos, Lali entendía perfectamente la actitud de Peter y la respuesta a cada pregunta que le había hecho.

Pensando, la noche anterior, después de llamar a Cande contándole la visita de Peter a su casa, había decidido esperar y ver cómo funcionaban las cosas entre ellos durante el siguiente mes para hablar con él y decirle todo lo que tenía guardado y responder sus preguntas, que aunque no se las dijera ella sabía que si las tenía.

Las puertas del ascensor se abrieron y ambos se despidieron con un beso en la boca hasta la tarde, que era cuando se volverían a ver.

Peter entró a su oficina y al cerrar la puerta y darse la vuelta se encontró a Paula apoyada en la mesa, él la miró y ella se acercó a él para saludarlo con un beso en la mejilla.

Paula: Sé que es raro verme aquí, pero necesito hablar contigo.
Peter: Yo…
Paula: Tranquilo que vengo en son de Paz.
Peter: Vale, siéntate – Ella se sentó y luego él.
Paula: ¿Cómo has estado?
Peter: Bien, ¿qué es lo que quieres hablar conmigo?
Paula: No te preocupes, solo vine a recuperar a mi amigo.
Peter: ¿Amigo?
Paula: Si, ¿O no te acuerdas que antes fuimos amigos?
Peter: Claro que me acuerdo, pero pasaron muchas cosas desde entonces.
Paula: Si, lo sé… pero quiero recuperar a mi amigo.

Peter la miró y no pudo evitar sorprenderse. En más de una ocasión le había dicho que si no eran pareja no serían nada.

Peter: No lo tomes a mal, pero pensé que no querrías verme después de lo que pasó. Reconozco que no me comporté muy bien contigo estos últimos días y tú siempre dijiste que…
Paula: Recuerdo perfectamente todo lo que dije, pero ahora veo las cosas de manera diferente.
Peter: ¿Y por qué justamente ahora?
Paula: A veces pasan cosas que te hacen cambiar.
Peter: No te entiendo.
Paula: Tal vez después lo hagas.

Peter la miró y se quedó en silencio.

Paula: ¿Entonces, amigos?

Paula estiró la mano esperando a que Peter se la estrechara.



CONTINUARA…