Aviso

Ya sé que llevó más de 2 semanas sin subir capitulo, pero sintiéndolo mucho no podre volver a subir capítulos hasta Septiembre. Eso es por que dentro de unos días me voy a Granada y Extremadura y estos días estoy en casa solo para dormir y poco más. Espero que podais entenderlo.

Máscaras C.68

MÁSCARAS.

Elva se levantó de la silla y la miró.

Elva: Hola.

Lali se quedó en silencio.

Elva: Ya sé que se te hace raro verme aquí pero necesito hablar contigo.

Lali: Usted me dirá, yo la escucho.

Elva: Quiero que hablemos de Paula, de ti… y de Peter.

Lali: Ah, ¿y sobre que quiere hablar?

Elva: Tú sabes el estado en que está mi hija – agachó la cabeza – lamentablemente no le queda mucho tiempo de vida.

Lali: Si – suspiró – y créame que lo siento mucho.

Elva: Lo sé, se ve que tienes buenos sentimientos.

Lali: Perdón, pero todavía no encuentro motivo a  esta conversación.

Elva: Me preocupa ver a Paula tan deprimida, supongo que con su situación actual es normal ese estado.

Lali: Pero yo no puedo hacer nada contra eso.

Elva: Contra su enfermedad no, pero tienes una relación con Peter.

Lali agachó la cabeza sintiéndose culpable.

Elva: Él era su felicidad, y si tal vez le dijeras que fuera a verla para que se distrajera ella cambiaria un poco su actitud.

Lali: ¿Por qué no se lo pide usted?

Elva: El otro no me porté muy bien con ustedes y no sé cómo pueda reaccionar.

Lali: Él no es un ogro, pero supongo que si se los pide como me lo acaba de pedir a mi seguro que no se opone.

Elva: Ya sé que no es un ogro, pero supongo que por el papel que ocupas en su vida te será fácil convencerlo y así ayudarme que la agonía de mi hija sea más llevadera.

Lali tragó seco, escuchar la voz pasiva de Elva había hecho que su sentimiento de culpabilidad aflorara de nuevo y se sintió como una mierda al sentir que había jodido su vida.

Elva: Sé que las cosas entre ellos no van a volver, y lo entiendo, pero me gustaría que hiciera el intento de hablar con él.

Lali: Está bien, voy a hablar con.

Elva: Gracias.

Se acercó a ella y la dio un beso en la mejilla.

Elva: No te quito más tiempo.

Salió dejando la puerta cerrada, Lali caminó hasta una silla y se sentó, cerró los ojos y unas lágrimas comenzaron a rodar por sus mejillas.

Mery, Gas y Vico entraron y Lali no tardó en secarse las lágrimas.

Mery: ¿Qué pasó, que quería?

Vico: Te dijo algo, porque si es así…

Gas: Ya cállate y deja que hable.

Los 3 la miraron y Lali atinó a levantarse y entrar al estudio fotográfico.

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Por la tarde después de ayudar a Javi con los deberes, fue a su cuarto a ducharse y cambiarse, estuvo toda la tarde pensando en la conversación que tuvo con Elva, solo tenía una opción y se la haría saber a Peter cuando tuviera la valentía suficiente para mirarlo a la cara y decírselo, esa noche no se lo diría, lo único que harían esa noche era hacer como que estaban solos y nada ni nadie los iba a molestar.

CONTINUARA…

Máscaras C.67

MÁSCARAS.

Javi la miró.

Javi: ¿Qué es lo que me quieres decir?

Lali: No me gusta que estemos enfadados – Javi agachó la cabeza – y me parece que a ti tampoco.

Se sentó en el suelo junto a él.

Lali: Sé que tienes muchas preguntas que no he respondido todavía, y te prometo que lo voy a hacer – Javi la miró de nuevo- solo quiero que me des tiempo, solo eso.

Javi: Yo quiero saber una cosa.

Lali: Te prometo que cuando encuentre el momento adecuado y la forma correcta te lo diré.

Javi: ¿Y cuándo va a ser eso?

Lali: Espero que pronto.

Javi: ¿Y puedo saber al menos que fue él para ti?

Lali: Fue una de las personas más importantes de mi vida hasta que naciste tú.

Javi se hincó y la abrazó.

Javi: Te quiero mucho.

Lali: Yo más mi amor – le dio un beso en la cara.

Javi: ¿Puedo dormir contigo hoy?

Lali: ¿Tú que crees?

Javi: ¿Y podemos ver una peli?

Lali: ¿Así que lo único que quieres es ver la tele?

Javi: Un poquito.

Lali: Buen vamos, pero ya a no ser que quieras que te haga cosquillas.

Javi: No, cosquillas no.

Comenzó a correr y Lali lo siguió, después de jugar, Javi se durmió viendo la peli, mientras Lali le acariciaba la cabeza.

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La mañana siguiente Lali tenía que trabajar con Gas y Vico en terreno, así que no fue hasta la tarde, cuando llegó a la revista, que pudo ver a Peter, aunque no faltaron las llamadas telefónicas durante toda la mañana.

Lali: Estoy en el ascensor, enseguida llego – sonrió – yo también.

Colgó mientras que Gas y Vico los intentaban imitar, Gas era ella y Vico era Peter.

Gas: Perdón, cambia ya esa cara.

Vico: Si las miradas mataran haría ya bastante tiempo que estaría muerto.

Gas: Estaríamos – lo corrigió, miró a Lali y le pasó un brazo por el hombro y ella le sonrió – Pero Lali, recuerda que no somos malos.

Vico: Cuidado que como Peter te vea así no te deja un hueso bueno – Gas la soltó de golpe.

Lali: ¿Y van a seguir?

Las puertas se abrieron y antes de que Lali le diera un golpe como cada vez que la molestaban, salieron de allí.

Antes de volver a trabajar, fue a buscar a Peter y lo encontró en la dispensadora de agua, le tapó los ojos y le dio un beso en la mejilla.

Lali: ¿Quién soy?

Peter: A ver, déjame pensar, no me quiero equivocar.

Lali lo golpeó, él se dio la vuelta y la abrazó.

Lali: Oye, yo soy inconfundible.

Peter: Fue una broma, sabía que eras tú por el perfume.

Lali: Mala broma.

Peter: No te enojes.

Peter la besó y ella lo abrazó.

Peter: Te invito esta noche a mi casa a cenar y… - sonrió.

Lali: ¿Y… que más?

Peter: Bueno, si tú quieres podemos portarnos mal y hacer travesuras.

Lali: ¿Y de qué tipo de travesuras estaríamos hablando?

Peter: Las que tú quieras.

Peter le susurró algo al oído a Lali y ella se sonrojó.

Lali: Bueno, pero ahora tengo que terminar unas cosas, así acabo un poco antes y poder irme a casa.

Peter: Entonces vete, antes que me arrepienta y te secuestre.

Lali le dio un beso y se fue a la oficina para trabajar en el laboratorio fotográfico, antes de entrar vio a Gas, Mery y Vico fuera de la puerta.

Lali: ¿Y ustedes?

Vico: Te buscan ahí dentro.

Lali: ¿Quién?

Gas: Mejor entras y lo ves tú mismo.

Mery: Si, nosotros te esperamos.

Lali los miró y entró encontrándose a Elva, la madre de Paula, esperándola, cerró la carpeta y la miró.

Lali: ¿Qué hace aquí?

CONTINUARA…

Máscaras C.66

MÁSCARAS.

En el transcurso de la mañana dieron de alta a Paula, mientras Elva y José hablaban con el doctor, ella fue hacia la sala de espera, cuando vio a Peter se lanzó contra él abrazándolo, él se quedó inmóvil, Lali quien estaba junto a Nico los miró con tristeza y Peter hizo una mueca.

Lali fue la primera en irse de hospital, Paula en ningún momento había dejado de abrazar a Peter, aunque el intentó más de una vez soltarse, se le hizo imposible. Por la tarde volvieron a la oficina, mientras Mery, Vico y Gas hablaban, Lali jugaba con un lápiz y con la cabeza en cualquier parte.

Gas: No somos nada.

Mery: Yo todavía sigo en shock.

Gas: Si, es increíble como de un momento a otro te cambia la vida.

Vico: Lo poco que le queda de vida.

Mery: No digas eso.

Vico: Lo dijo Peter.

Gas: Si, yo escuché cuando le decía a Agus que estaba desahuciada.

Vico: De todas formas no es mucho lo que va a perder.

Mery: No puedes ser tan cruel.

Vico: No soy cruel, es la pura verdad, además, una histérica menos en la tierra.

Mery: Ustedes dos se pasan.

Gas: Y con todo el dinero que tienen que no puedan hacer nada.

Mery: Ves, eso no da la felicidad.

Vico: Pero eso ayuda bastante – se rio- y no es broma.

Mery: Son un horror, no se puede hablar con ustedes.

Vico: ¿Y ahora que hicimos?

Gas: Que genio.

Vico: Imagínate que ahora está fuera la moribunda.

Lali: YA CALLENSE.

Mery: Lali-  se asustó por el gritó y la miró - ¿Qué pasó?

Lali: Me tienen harta con el tema, llevan más de 1 hora hablando sobre eso y haciendo mofa de la situación.

Se levantó de la silla y golpeó la mesa.

Lali: ¿Qué les pasa?, ¿acaso no piensan en los demás? ¿Qué tienen en la cabeza?

Salió de la sala con un portazo, los 3 se miraron entre ellos.

Gas: Creo que se enfadó.

Vico: ¿Creen que nos pasamos un poquito?

Mery: ¿Un poquito solo?

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Lali llegó al baño, se mojó la cara y se quitó las pocas lágrimas que se le escaparon, a pesar de que nunca se llevó bien con Paula sentía pena por la situación que estaba pasando, al salir ayudó a Ro con unas fotocopias mientras ella ordenaba unos archivos, no estaba en condiciones de volver con sus compañeros y había adelantado varias cosas, por lo que tenía algo de tiempo libre.

Cuando salía de la fotocopiadora se encontró con Peter en la puerta.

Peter: Lali, te estaba buscando.

Lali: Ah.

Peter: Sigues enfadada por lo de ayer, ¿Verdad?

Lali: No.

Intentó pasar pero Peter no la dejó, él agarró su cintura y ella lo miró.

Peter: Algo tienes.

Lali: Déjame salir.

Peter: ¿Todavía sigues enfadada por lo de anoche?

Lali: Ya te he dicho que no, déjame que tengo que darle esto a Ro.

Peter: Pero supongo que puede esperar un rato, ¿no?

Lali: Ya Peter, tengo que irme.

Peter: Te dejo pasar, si me das un beso.

Lali lo miró entrecerrando sus ojos y Peter sonrió.

Lali: Estás loco, nos pueden ver.

Peter: ¿Y eso que? La mayoría ya sabe que estamos juntos.

Lali: Pero se supone que estamos trabajando.

Peter: Un momento de distracción no le viene mal a nadie.

Lali no pudo evitar sonreír.

Lali: Solo uno.

Peter: Como tú digas.

Pegó su frente a la de ella, le besó la punta de la nariz y luego bajó a sus labios, cerraron los ojos y Lali puso sus brazos alrededor del cuello de Peter, Peter la apegó más contra su cuerpo apoyándola en la pared, se separaron lentamente, se miraron y Peter la volvió a besar, Lali le siguió el beso unos segundos y se separó despacio.

Lali: Dijiste que solo un beso.

Peter: Pero lo que no sabías es que con el primero venía un segundo beso de regalo.

Lali: Tramposo.

Peter: Lo sé – la besó y la miró - ¿Nos vemos al rato?

Lali asintió, lo besó y salió de allí.

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La actitud de Javi no había cambiado estos días, tal vez era el momento de responder las preguntas que tenía el pequeño, al terminar de cenar fue a su cuarto, al entrar cerró la puerta y se apoyó en ella, Javi la miró.

Lali: ¿Te puedo acompañar?

Se acercó a él y se hincó junto a él.

Lali: Hay algo que quiero hablar contigo.

CONTINUARA…

Máscaras C.65

MÁSCARAS.

Le mostró el cheque con una cantidad de dinero elevada.

Doctor: Haga el favor de salir – estaba a punto de salir y se quedó en el umbral esperando a que saliera.

Paula: ¿Por qué no lo piensa? A nadie le viene mal un poco de dinero extra.

Doctor: Señorita, por favor.

Paula: Y justo ahora que se acerca Navidad, yo creo que le vendría muy bien.

Le volvió a mostrar el cheque y el doctor la miró.

Paula: ¿Qué dice?

Doctor: ¿Qué quiere que haga?

Recibió el dinero y se lo metió en la camisa, Paula sonrió y volvió a la camilla.

Paula: De momento preocúpelos, invente exámenes, usted sabrá lo que les dice, pero les tiene que quedar claro que mi salud es delicada – apoyó la cabeza en la almohada – y que no me pueden hacer pasar malos ratos porque podría ser fatal para mí, ¿me entiende?

Doctor: Creo que lo que realmente necesita es un psicólogo.

Paula: Ya estamos juntos en esto, si lo hace bien la recompensa será mejor… por ahora es todo.

Doctor: ¿Y piensa pasar la noche aquí?

Paula lo miró.

Paula: Recuerde que estoy muy débil.

El doctor la miró no muy convencido de querer apoyar a Paula, pero ya había aceptado el cheque y no había vuelta atrás.

Salió de la habitación y se dirigió a la sala de espera donde estaban Lali, Peter y Nico.

Nico: ¿Cómo está?

Peter: ¿Despertó?

Lali: Supongo que ya nos podemos ir.

El doctor los miró con remordimiento.

Doctor: Lo mejor será que la señorita pase la noche aquí.

Peter: ¿Pero, qué tiene?

Doctor: Eso lo sabremos una vez nos den el resultado de los análisis.

Nico: ¿Pero tan grave es?

Doctor: No es para preocuparse, pero puede que sea más grave de lo que esperemos.

Lali: ¿Qué quiere decir con eso?

Doctor: No quiero dar un diagnostico precipitado, mejor esperemos a mañana.

El doctor se fue y Lali comenzó a sentirse culpable por no haberla creído.

Nico: Yo creo que lo mejor es avisar a su familia, para que al menos sepan que está aquí.

Peter: Tienes razón.

Mientras Peter hablaba por teléfono se miraba de reojo con Lali quien estaba sentada, cuando se colgó se sentó junto a ella, Nico había ido a por café y estaban los 2 solos.

Peter: No hace falta que estés aquí, si quieres te puedes ir.

Lali lo miró.

Peter: ¿Qué te pasa?

Lali: Llámame loca si quieres, pero me siento culpable de no haberla creído.

Peter: No, no estás loca, la verdad es que yo tampoco la creí mucho, tiene la manía de exagerar todo.

Lali: ¿Crees que lo que tiene sea grave?

Peter: Espero que no, como ya te he dicho a ella le gusta exagerar las cosas.

Lali: Pero el doctor se veía mal.

Peter: Yo le vi nervioso, ¿Tú no?

Lali negó con la cabeza y se quedó mirando, aunque se sentía culpable por la pelea que tuvo con Paula no podía evitar sentir rabia al recordar como los encontró.

Peter: ¿Ahora qué te pasa?

Lali: Me sentí fatal cuando te vi con ella.

Peter se alejó un poco, se cruzó de brazos y se apoyó en el respaldo de la silla.

Peter: Yo no me sentí muy bien cuando te vi con Nico y menos cuando se tomaron la mano.

Lali: Pero ustedes se estaban besando, ¿Por qué no me dijiste que ibas a cenar con ella?

Peter: Para evitar una discusión.

Lali: ¿Y el beso?

Peter: Ella misma te lo dijo, fue un impulso… de hecho me dijo que te llevara.

Lali: Y no me dijiste.

Peter: ¿Hubieras ido?

Lali: Claro que no, pero ese no es el punto.

Peter: ¿Y qué hay de ti y de Nico? ¿Se divirtieron?

Lali: Me junté con Nico por unos asuntos de trabajo. Me dijo que unas personas, no se quienes, querían hablar conmigo por el tema de unas fotos.

Peter: ¿Por qué todo se nos tiene que hacer tan complicado?

Se acercó nuevamente a ella y junto su frente con la de ella.

Lali: Tal vez deberíamos de empezar con no ocultarnos nada.

Peter: ¿Nunca más?

Lali: Nunca más.

Sonrió y se acercó más a él, antes de que se besaran llegó Nico con los cafés.

A los pocos minutos llegaron los padres de Paula y lo único que hicieron fue insultar y culpar a Lali y a Peter por la salud de Paula. Después de hablar con el doctor se quedaron en la sala de espera hasta el amanecer que fue cuando el doctor volvió para dar los resultados de los exámenes, los cuales ella misma había mandado inventar.

Elva: ¿Qué tal está mi hija?

José: ¿Qué pasó?

El doctor los miró a todos.

Doctor: Paula tiene tumor cerebral.

Elva: ¿Qué?

José: Eso es imposible.

Peter: ¿Está seguro?

El doctor negó con la cabeza.

Elva: ¿Pero se puede operar no?

Doctor: Lamentablemente, el lugar en el que se encuentra, la operáramos solo adelantaría su muerte, lo siento mucho.

El doctor se fue sintiéndose la mayor basura de todas por causar dolor a la familia de Paula.

CONTINUARA…

Máscaras C.64

MÁSCARAS.

Peter se levantó y miró a Nico.

Peter: Lali, ¿Qué haces aquí?

Lali: Yo también tengo derecho a divertirme.

Tomó de la mano a Nico, aunque cada vez tenía más ganas de llorar.

Lali: ¿No crees?

Paula: No es lo que crees.

Lali: No estoy hablando contigo.

Peter: Porque no mejor no calmamos, para poder hablar.

Lali: No, fíjate que no creo que tengamos mucho sobre lo que hablar, solo vinimos a saludar.

Peter: No… Pero es que no…

Lali: No me tienes que dar explicaciones, tú sigue divirtiéndote que yo voy a hacer lo mismo.

Antes de que Peter pudiera hacer algo Lali había vuelto a su mesa con Nico y se sentó nuevamente, cuando intentó seguirla, Paula lo detuvo.

Paula: No Peter, yo sé que tuve la culpa por haberte besado, fue un impulso, no lo puede evitar - lo miró – pero no creo que vuestra relación funcione si siguen ocultándose cosas, tú no le dijiste que hoy cenarías conmigo, ¿y ella te dijo que saldría con Nico?

Peter: No, pero…

Paula: No hay pero que valgan, deja que pase un rato y después, cuando estén más tranquilos hablaran.

Peter la miró, sabía que si iba a donde Lali ninguno de los 2 mediría las palabras y menos el volumen que usaban y no quería dar la nota en el restaurante.

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Nico miró a Lali que se había quedado callada.

Nico: Lo siento mucho Lali, yo sé que entre tú y Peter hay…

Lali: Nada, no hay nada.

Tomó su vaso de agua y bebió.

Lali: ¿Y qué pasa con esas personas que iban a venir?

Nico: Deben de haberse retrasado, pero si quieres nos vamos, no te veo muy bien.

Lali: Pero…

Nico: Yo después me comunico con ellos.

Lali: Gracias.

Se levantó y se fue junto a Nico, Peter se dio cuenta y salió tras de ellos, detrás de él salió Paula.

Peter: Espera.

Lali: ¿Ahora qué quieres?

Peter: Quiero saber qué es lo que hacías aquí con Nico

Lali: Ya te lo dije, vine a divertirme. Tú estabas haciendo lo mismo, ¿no?

Peter: Pero te juro que no es lo que parece.

Lali: No jures nada, no necesito que me expliques nada, mejor regresa con tu novia y sigan en lo que estaban.

Paula: Lali, estas…

Lali: TÚ CALLATE, sabías perfectamente que estaba aquí.

Nico: Lali…

Paula: Claro que no, es más, yo le dije a Peter.

Lali: Me importa una mierda lo que le dijiste a Peter.

Peter: Ya deja tu histeria- miró mal a Lali – tú te enfadas por que no sabías que estaba con Paula, pero tú tampoco me dijiste que saldrías con Nico.

Lali: Pasa, que yo no me besé con Nico.

Peter: Es que eso…

Lali: Ya cállate, no me vas a volver a ver la cara, se acabó.

Nico: ¿Lali, por que no mejor no nos vamos?

Paula: Lali, yo en ningún momento quise ocasionar problemas.

Agachó la cabeza y Lali la miró.

Lali: No te creo nada, así que deja de hacerte la mosca muerta.

Peter: Tampoco hace falta que le hables así.

Lali: Mira, ahora hasta la defiendes.

Peter: Ella me dijo que solo quería ser mi amiga solamente.

Lali: Claro, y tú le creíste – le sonrió con rabia – que tonto eres, vamos Paula deja de fingir y muéstrate tal cual eres.

Paula: No sé de qué hablas.

Apoyo la cabeza en el hombro de Peter fingiendo sentirse mal.

Lali: Porque te conviene.

Peter: Lali, ya basta.

Lali: No, no basta, me parece mentira que no te des cuenta que te está engañando.

Paula: Es una lástima que creas eso – fingió un mareo – me encuentro mal.

Lali: Es la consciencia, no te confundas.

Paula: ¿Me podrías llevar a casa, por favor? – miró a Peter.

Peter: Si, vamos.

Lali y Peter se miraron, Peter se dirigió hacia su auto.

Lali: Conduce con cuidado.

Al escuchar el tono irónico en la voz de Lali, Paula fingió desmayarse, Peter la sujetó, Nico fue en su ayuda cayendo en la trampa, ya que él no sabía esa parte del plan, dejando a Lali atrás.

A pesar de que ambos intentaron reanimarla fue imposible, la llevaron al hospital y los tres se quedaron en la sala de espera. Lali y Peter estaban sentados, Nico de pie.

Lali: La verdad no sé qué hago aquí.- se cruzó de brazos.

Peter: ¿Podrías tener, por una vez en tu vida, un poco de sensibilidad?

Lali: Hay una gran diferencia entre ser sensible a ser idiota y yo idiota no soy y sé que todo lo de Paula es mentira.

Nico: ¿Pueden dejar de pelear? Estamos en un hospital, compórtense… si es que pueden.

Peter: Tienes razón.

Lali: Perdón.

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Paula seguía en la habitación recostada en la camilla, el doctor que la estaba atendiendo la miró con los brazos cruzados.

Doctor: Estamos solos señorita, puede abrir los ojos.

Paula abrió los ojos lentamente.

Doctor: No hace falta que siga fingiendo, usted se encuentra en perfectas condiciones – Fue a su lado y la ayudó a sentarse.

Paula: Perdón, pero era necesario.

Doctor: Y ahora es necesario que se vaya, hay gente que realmente está mal y necesita ser atendida.

Comenzó a ir hacia la puerta, pero Paula lo detuvo.

Paula: Espere, necesito hablar con usted.

Doctor: La escucho.

Paula sacó una chequera y un lápiz.

Paula: ¿Cuánto quiere por ayudarme?

CONTINUARA…