Máscaras C.96

   Máscaras.

Lali lo miró sorprendida y con el corazón latiendo a mil por hora, Peter le sonrió.

- Peter: Bueno, si prefieres a Cande yo veré como me las arreglo con Agus.

Lali se rio.

- Lali: Cállate y bésame.

Le tomó la cara entre sus manos y lo besó. Él la abrazó por la cintura y ella luego enredó sus brazos en el cuello de Peter, al separarse Lali pegó su frente a la de él.

- Peter: ¿Eso lo tengo que tomar como un sí?

- Lali: ¿Tú que crees?

- Peter: Todavía no me queda muy claro.

Sonrió y Lali lo volvió a besar, cuando se separaron él se puso de pie y la tomó de la mano llevándola a la puerta de salida.

- Peter: Tenemos que ir a celebrar.

- Lali: Pero yo no puedo salir así, estoy hecha un desastre.

- Peter: Claro que no.

- Lali: Claro que sí, mira mi cara.

- Peter: Está hermosa, igual que siempre.

La acercó a él y la besó.

- Peter: ¿Adónde quieres ir a almorzar?

- Lali: A cualquier lugar donde se me quite el hambre que tengo.

- Peter: Ves, ese es mi hijo que está reclamando.

- Lali: Seguramente, pero no voy a salir así.

Le soltó la mano.

- Lali: Ya vengo.

Peter suspiró.

- Peter: Mujeres.

Se sentó en el sillón para esperar a Lali mientras se cambiaba. Treinta y cinco minutos después la vio aparecer totalmente renovada.

Pasaron lo que quedaba de tarde juntos. Al terminar de almorzar se quedaron conversando un rato y sin querer salió el tema de Nicholas y de la decisión que había tomado Lali.

- Peter: No es tan terrible, no te tienes que preocupar por encontrar un trabajo aun.

- Lali: Como que no, lo que es Javier y yo no nos alimentamos del aire, también tengo que pagar su colegio, las cuentas...

- Peter: Si sé Lali, pero ahora estamos juntos y yo puedo pagar todo eso.

- Lali: Yo ya me acostumbré a ser independiente. Además, tú tampoco eres millonario.

- Peter: Está bien, no soy millonario, pero tampoco soy un muerto de hambre como para no poder hacerme cargo Javier y de ti... Ah y del bebé.

- Lali: No quiero que te hagas cargo de mí.

Lali lo miró entrecerrando los ojos.

- Lali: Yo me puedo mantener solita, no soy ninguna inútil.

- Peter: No dije que fueras una inútil, no te alteres.

- Lali: No estoy alterada... Por ahora, si no encuentro trabajo luego voy a estarlo.

- Peter: Te propongo algo para que los dos estemos tranquilos.

- Lali: A ver ¿Qué cosa?

- Peter: Como ya decidiste renunciar ¿Te parece si te tomas estos nueve meses para descansar y una vez que nazca el bebé te pones a buscar trabajo nuevamente?

- Lali: Un. No sé, voy a pensarlo.

Siguió tomándose su copa de helado con fruta y Peter comiéndose su pedazo de pie de limón.

- Lali: Es que yo debería haber esperado que me despidieran.

- Peter: Pero aun no envías la carta de renuncia, tal vez si mañana hablas con Ni...

- Lali: Ni siquiera me lo nombres. De solo imaginar lo que hubiera pasado si no abre su boca para hablar me da nauseas.

- Peter: Eso es por el embarazo. Pero volviendo al tema en cuestión, tengo que reconocer que si no hubiera sido por él probablemente tú y yo no estaríamos aquí.

- Lali: No lo defiendas.

- Peter: No lo estoy defendiendo, me dieron ganas de lanzarlo por la ventana cuando me contó todo, pero después pensándolo mejor y con la cabeza más fría, no debe haber sido fácil decidirse a decirnos todo lo que sabía.

Suspiró e hizo una mueca con la boca.

- Peter: Después de todo... Está enamorado de ti,

Lali se quedó pensando.

- Peter: Y yo creo que sabía lo que le esperaba si hablaba.

- Lali: Si me sigues diciendo esas cosas me voy a sentir culpable.

- Peter: Esa no es la idea, pero piensa en lo que te dije.

- Lali: ¿Podemos cambiar de tema? Te juro que de lo que menos quiero hablar en este momento es de Nicholas.

- Peter: Bueno, como ordene. Pero piensa la idea de buscar trabajo después de estos nueve meses.

Continuara...

:)